Rey González/El Estado
La Meseta de Copoya es una zona de conservación ecológica de gran importancia, esta formación geológica es una región de captación de agua subterránea, además de la gran biodiversidad y la importancia cultural.
Pese a su importancia en temas medioambientales, la meseta ha sufrido invasiones y los asentamientos persisten hasta la fecha; Carlos Narcía López, profesor investigador de la Universidad de Ciencias y Artes de Chiapas (Unicach), explicó que durante varios años en el laboratorio de Geociencias, de la licenciatura en Ingeniería Ambiental, han tomado muestras de suelo de la Meseta, dando como resultado que el territorio es susceptible a vibraciones constantes.
Narcía López puntualizó que en la primera etapa de la investigación, los datos arrojaron que ciertas zonas vibran a 14 hertz, provocando derrumbes y remoción de masas, como la ladera sur, que colinda con Tuxtla Gutiérrez.
El experto señaló la importancia de conocer los mapas de riesgo por derrumbe en Tuxtla Gutiérrez, siendo la Meseta una de ellas, por lo que comprar en esa área no es recomendable.
