Rey González/El Estado
La Asociación Mexicana de Profesionales Inmobiliarios (AMPI), sección Chiapas, presentó al nuevo consejo directivo, con el objetivo de fortalecer la profesionalización de la compra-venta de inmuebles; la idea es no heredar problemas a los futuros compradores, vinculados con instituciones estatales y municipales, notarios, peritos valuadores, entre otros.
Odeth Herrera Pineda, presidenta de la AMPI en Tuxtla Gutiérrez, explicó que la ausencia de una entidad reguladora ha permitido que los asesores pierdan de vista el objetivo principal de las transacciones inmobiliarias: guiar y velar por los intereses de los usuarios en un proceso tan crucial, como lo es comprar una casa.
Describió otras malas prácticas, como publicidad engañosa en donde se publica una propiedad, sin embargo, esta no cuenta con la información de los honorarios del vendedor, también el realizar tratos a espaldas de otros colaboradores.
Los asesores detallaron que actualmente en el centro de Tuxtla Gutiérrez existe un abandono de casas y negocios, esto se debe a que los empresarios buscan establecerse en las plazas, también las constantes manifestaciones son un factor importante para que los negocios se salgan del centro, teniendo como consecuencia una disminución en el valor de las propiedades.
Determinaron el tema de venta de viviendas apirta un buen porcentaje al PIB de Chiapas; para este año se espera en compra ventas se generen 4 mil 500 millones de pesos, los cuales aporta impuestos federales, estatales y locales. Como asociación están promoviendo la Ley Inmobiliaria Chiapas la cual obligará a los asesores a tener una licencia para ejercer dicha actividad.