Lennyn Flores/El Estado
Tuxtla Gutiérrez, Chiapas (El Estado).-Ahí, donde más de 49 vidas se apagaron el jueves 9 de diciembre, donde la muerte fue la frontera que los sueños de hombres, mujeres, niños y niñas de Centroamérica no pudieron penetrar, sanadoras y médicos tradicionales hicieron una ofrenda en honor de las almas migrantes y también para pedir por la sanación de la humanidad.
Con la consigna de que los seres humanos somos habitantes del mundo y por esa razón no deberían existir las fronteras, viajaron desde el estado de Oaxaca para llegar a este punto, donde todavía se respira el peligro y la indignación, donde 56 migrantes perdieron la vida a consecuencia del tráfico de personas, de la corrupción e impunidad.
Con la fe puesta en la sanidad del mundo, ofrecieron pan, fruta, bebidas, tabaco, música y danza, porque no se debe olvidar que todos los territorios pertenecen a los seres vivos y porque todas y todos tienen derecho a habitar la tierra.
Silvia Hernández, integrante de esta agrupación, reclamó que la migración no es un delito sino un derecho que se adquiere por necesidad, por la exclusión de un sistema que no es igualitario, por la pobreza, el abandono y la inseguridad.
“No podemos quedarnos callados, ésta herida nos duele a todos y quien no sienta indignación es porque no está vibrando en su ser humano, es porque no está en su centro para decir que caminemos por una justicia cósmica para los pueblos, porque lo necesitamos.”
El jueves 9 de diciembre, un tráiler que transportaba a por lo menos 200 migrantes centroamericanos se impactó en el muro de un puente peatonal, por lo que terminó volcado a un costado del tramo carretero de Chiapa de Corzo-Tuxtla Gutiérrez; en el lugar se reportó un saldo de 49 muertos y más de 100 heridos, 7 personas más perdieron la vida en los hospitales a los que fueron llevados.
Hasta el momento, no todos los cuerpos han sido repatriados, para los sobrevivientes, el gobierno de México ofreció el apoyo total, sin embargo, grupos de activistas y organizaciones protectoras de los derechos humanos de las y los migrantes, calificaron como fallidas las políticas migratorias de México y demás países de centro y Latinoamérica.