Lennyn Flores/El Estado
Tuxtla Gutiérrez, Chiapas (El Estado).-En el marco de la presentación del libro “El papel de la equidad de género en la actividad política de los pueblos originarios en Chiapas”, en las instalaciones de la coordinación estatal del Partido del Trabajo (PT), María Roselia Jiménez Pérez, diputada local en la 68 legislatura, dijo que en la actualidad, las mujeres indígenas que ocupan una curul, son vistas como “bicho raro” por sus mismos compañeros.
Celebró que la participación de las mujeres indígenas esté tomando fuerza, aunque lamentó que quienes no provienen de pueblos originarios no se acostumbren a verlas en puestos de gran envergadura, por lo que, en su propia experiencia, ha notado que no son sinceros, pues ha vivido escenarios “tristes, dolorosos, que nosotras tenemos que recorrer para transformar y cambiar las culturas”.
La también vicepresidenta de la mesa directiva del Congreso del Estado, dijo que en Chiapas hay distritos electorales usurpados, por lo que pidió a las autoridades electorales que miren con los ojos de la razón, la verdad, de los valores, la identidad y el derecho, para poder decir que las cosas están cambiando.
Sin importar la afiliación partidista, Jiménez Pérez felicitó a las diputadas de las diferentes culturas, ya que son muestra de que en Chiapas se está viviendo la paridad, pese a que hace falta mucho camino por recorrer.
En este sentido, aconsejó que, cuando se hable del tema de las mujeres indígenas, es necesario ir a donde están ellas para conocer el verdadero escenario, toda vez que llegar y sacarlas no es fácil “porque tenemos que pasar por la palabra y consentimiento de los hombres, que no es nada fácil; y, a veces, cuando estamos nosotras hablando del liderazgo de las mujeres o fortaleciendo el liderazgo de las mujeres también nos llegan a amenazar con que nos van a encarcelar, y no en las cabeceras, sino en las cárceles de la misma comunidad”, reveló.
No obstante, remarcó que hay esperanza y también muchos municipios que involucran a las mujeres indígenas.
Dijo que dicho libro en el que participan mujeres indígenas simpatizantes del PT, cuenta con la identidad, cultura, el saber, anhelo y la esperanza de que las mujeres pueden trascender, pero la cultura tiene que cambiar, por lo que las convocó a salir, porque desde dentro “no nos van a hacer caso”.
A nivel social, la legisladora dijo que en el país todavía hay muchos hombres y mujeres con problemas de racismo, que consideran a las y los indígenas como inferiores, como personas que no piensan y que no tienen derechos y no valen nada.
“Actualmente ese sentir ha hecho huella profunda en los jóvenes, sobre todo en la cultura Tojolabal, no tienen mucho avance en la profesionalización, sobre todo las mujeres porque nunca les dieron permiso para participar, en el caso mío que se me negó estudiar, pero bueno, tuvimos la oportunidad, pero las compañeras de la comunidad no tuvieron”, declaró.
Aunque la educación de un derecho para todas y todos los mexicanos, lamentó que las mismas autoridades son las que atropellan estos derechos: “las autoridades electorales han negado la identidad, son ciegas, son ciegos los magistrados en el tema electoral, porque una mujer indígena que ya es valiente y que reclama su derecho, no se le reconoce”.
VIA: Silvano Bautista