Lennyn Flores/El Estado
Tuxtla Gutiérrez, Chiapas (El Estado).-La enfermedad renal es considerada una enfermedad silenciosa, por lo que es importante cuidar la salud y realizarse los estudios necesarios para que los especialistas puedan detectar algún fallo y con ello retrasar o prevenir algún padecimiento, ya que de inicio no se presentan síntomas, incluso cuando se pierde el 90 por ciento de su función, expuso José Enrique Gutiérrez Natarén, internista del Instituto Mexicano del Seguro Social (IMSS).
Los más propensos a tener problemas de riñón son los que tienen presión alta, sufren de diabetes, historial familiar del padecimiento, sobrepeso, adicción al tabaco, tener más de 50 años de edad, entre otros.
En el marco del Día Mundial del Riñón, que se celebra cada 11 de marzo, dijo que el mayor riesgo está en las personas obesas, por lo que se deben tomar medidas preventivas, como mantener su presión normalizada, reducir consumo de sal, control de glucosa en la sangre, dejar de fumar, realizar actividad física 30 minutos como mínimo, con lo que al mismo tiempo regulará su peso corporal.
Dentro de las funciones de los riñones figuran eliminar desechos y excesos de líquidos de la sangre, controlar el equilibrio químico del cuerpo, la presión arterial, mantiene los huesos sanos y forman glóbulos rojos para el buen funcionamiento del organismo.
Como mejoras alimenticias, se debe evitar el consumo excesivo de grasas para no aumentar los triglicéridos o colesterol; si es diabético debe disminuir las porciones de alimentos con azúcar, miel de abeja, jugos, así como consumir con moderación harinas, tortillas y demás cereales, pan dulce, galletas o pasteles.
Finalmente, Gutiérrez Natarén exhortó a la población chiapaneca a llevar una vida saludable, misma que influye en el cuidado y bienestar de los riñones a través de la alimentación adecuada; controlar el peso para prevenir diabetes, enfermedades cardíacas y otras condiciones asociadas con la enfermedad renal; revisar periódicamente presión arterial y niveles de azúcar en sangre; mantener una hidratación adecuada; evitar el tabaco y no automedicarse, a fin de no afectar este vital órgano.