INAH
El Estado/Agencia
En el Cerro Dulce, en el municipio de Chilón (Chiapas), el arqueólogo Juan Yadeun Ángulo de la delegación estatal del Instituto Nacional de Antropología e Historia (INAH), confirmó el hallazgo de una olla globular que tenía al interior restos de un chamán, los hechos ocurrieron durante la construcción de la Universidad Benito Juárez.
Según el INAH, el descubrimiento se dio cuando se pretendía hacer la instalación eléctrica, de inmediato se dio aviso al Instituto para que procedieran al resguardo de las piezas.
El arqueólogo narró lo siguiente: “fuimos comisionados para ir al lugar donde se encontraba esta maravillosa olla globular; es una tumba en la nada, no hay la menor evidencia fuera, ni en ningún lugar próximo que nos hablara de la posibilidad de encontrar esta tumba, que tiene un sentido maravilloso porque el señor que está enterrado, se ve que fue sentado como se sentaban los señores en el poder, en la vasija y él tenía como misión delimitar el inframundo, el espacio que ya pertenecía al señorío de Chilón, que debe de estar donde está el Convento Chilón, completamente en línea recta con el movimiento solar con esta tumba”.
Uno de los acontecimientos más importantes, es que al interior de la tumba estaban restos óseos de un chamán y el sitio donde fue hallada la urna representaba un faro en el inframundo, toda vez que había una separación entre la zona sagrada de Chilón y el espacio del mal que tenía como característica que las fuerzas eran incontrolables.
El personaje al interior de las ollas, describió Yadeun Ángulo, tenía una edad considerable debido a que ya no contaba con muelas y, además,
«tenía mutilación dental, es decir le habían hecho incrustaciones de tira en los dientes y también otros dientes limados en forma de tiburón. Seguramente era un chamán que protegía a su pueblo en vida y lo siguió protegiendo a muerte, ya que está delimitando el interior de ese mundo subterráneo del México antiguo”.
Créditos de la imagen: Juan Yadeun Angulo, arqueólogo del INAH.