El Estado/Agencia
Debido a que en los últimos días más de dos mil migrantes han acudido a las oficinas del Instituto Nacional de Migración (INM) en Tapachula para que su situación migratoria se regularice, la Comisión Nacional de Derechos Humanos (CNDH) emitió medidas cautelares para este organismo y otras autoridades de Chiapas vinculadas con la Secretaría de Salud, Protección Civil y la propia Comisión Mexicana de Ayuda a Refugiados (Comar), a fin de que las personas en situación de movilidad no sean afectadas en su integridad y seguridad.
El contexto, señala el organismo no gubernamental, muestra que en principio un promedio de 100 personas protestaron en las oficinas de la Subdirección de Regulación del INM para pedir que sean atendidos y después el número llegó a 500.
Posterior a eso, el Instituto sólo entregó 60 tarjetas por razones humanitarias y más de 440 migrantes se quedaron esperando el trámite. En el pronunciamiento, la CNDH remarca que las mismas personas en situación de movilidad han dicho que las autoridades han intensificado los operativos para detenerlos y destruirles sus documentos expedidos por la Comar.
Las medidas cautelares dirigidas a las autoridades antes citadas, buscan “que, de manera coordinada y en el ámbito de sus respectivas competencias, se garantice la atención humanitaria de urgencia a las personas manifestantes; que se les proporcione agua, suero hidratante, personal médico, especializado y de primeros auxilios, medicamentos y, de ser el caso, ambulancias para conducciones a hospital, especialistas que brinden atención psicológica, insumos de aseo personal, pañales desechables, entre otros.”
También se le pidió al INM a que agilice los trámites para la regularización de las personas en situación de movilidad y que también atiendan a quiene han solicitado condiciones de refugiados; la Comisión añade que es necesario que el Instituto garantice el libre transitar de aquellos que tengan sus documentos en regla.
Fotografía: cortesía/ilustrativa