Rey González/El Estado
De acuerdo con la Encuesta Nacional de Ocupación y Empleo (ENOE), en mayo de 2023 la Población Económicamente Activa (PEA) fue de 60 millones de personas, lo que implicó una Tasa de Participación de 60 por ciento.
Dicha población fue superior en 939 mil personas a la de mayo pero dw 2022. La Población No Económicamente Activa (PNEA) fue de 40 millones de personas, 42 mil personas menos que en el quinto mes del año pasado.
De la PEA, 58.3 millones de personas (97.1 %) estuvieron ocupadas durante mayo pasado: 1.1 millones más que en el mismo mes de un año antes. Las personas subocupadas -que declararon tener necesidad y disponibilidad para trabajar más horas- fueron 4.7 millones (8.1 % de la población ocupada), una reducción de 132 mil personas con relación a mayo de 2022.
La población desocupada fue de 1.8 millones de personas y la Tasa de Desocupación (TD) de 2.9 % de la PEA. Respecto a mayo de 2022, la población desocupada descendió en 173 mil personas y la TD fue menor en 0.3 puntos porcentuales.
En febrero del 2020, antes del impacto de la pandemia en el mercado laboral, la necesidad de empleo abarcaba al 19.7% de la fuerza de trabajo potencial. En mayo de ese año, la brecha laboral llegó a un máximo histórico de 52.9% debido al impacto del cierre de actividades económicas no esenciales para frenar el avance de la Covid-19.
Al indicador le tomó 28 meses retornar a su nivel prepandemia. A decir de Gabriella Siller, directora de Análisis Económico y Financiero de Banco Base, éste reflejaba con mayor amplitud a las personas “afectadas laboralmente” por la emergencia sanitaria.