La suma de 25 anomalías dan una cantidad cercana a los 72 millones de pesos de daños patrimoniales, según la ASE
El Estado/Agencia
Los reportes emitidos por la Auditoría Superior del Estado (ASE) revelan que el ayuntamiento de Chalchihuitán que encabezó Margarita Díaz, exalcaldesa y Hermelindo García, exsíndico, no comprobaron gastos en el 2018 que ascendieron a los 70 millones 973 mil 544 pesos, abarcando programas federales, obras, materiales de limpieza, compra de gasolina y hasta llantas que no fueron justificados ni comprobados.
En zona la situación política es delicada, considerando que está en funciones el Concejo Municipal pero el Tribunal Electoral del Poder Judicial de la Federación (TEPJF) ordenó que regrese a operar el ayuntamiento y todo el cuerpo del Cabildo.
No obstante, José Francisco Hernández Gordillo, Consejero Jurídico Municipal de Chalchihuitán, alertó que la decisión que tome el Congreso Local -al tomar protesta a los funcionarios para reintegrar sus funciones- podría generar desorden y se trataría de un acto injusto, al considerar que cuatro regidores firmaron la Cuenta Pública 2018 y con ello demostraron su omisión ante el desvío de dinero.
Dentro del informe de la ASE, se demuestra existen daños patrimoniales en obras pagadas pero no ejecutadas, pago en exceso de proyectos, dinero que fue ejercido de una forma distinta a los programas, construcciones no comprobadas y hasta gastos no justificados, todos con sumas millonarias.
La población de Chalchihuitán fue clara al mencionar que no permitirán la figura del ayuntamiento municipal y van a respaldar al Concejo; incluso, ya analizan la posibilidad jurídica de elecciones sin la necesidad de tener a los partidos políticos.